sábado, 21 de abril de 2012

Por un momento pensé que tenía dieciocho otra vez




El pasado jueves miré la predicción del viento en Tarifa, miré las webcam de Vadelvaqueros y la de "Arte y vida". Todo ideal para pasar una tarde perfecta.

Subo el material al coche (esta vez sin olvidarme nada, el último olvido fueron las velas ), llevo a mi hija a Inglés y por hoy las obligaciones las delego después de hacer la casa, la comida y dejar la cocina recogida.

Con tranquilidad subo el puerto del Cabrito rumbo a Tarifa y ya aparece el mar en el horizonte, me entra "el viruji" por el estómago y ahora es cuando empiezan los nervios por meterme a navegar. Veo un montón de velas y cometas en "Arte y vida", sin ninguna duda cojo a la derecha, hago el stop correspondiente, cruzo la carretera y ya es estoy en el aparcamiento frente a la playa.  ¡oh!  Muchas caras conocidas, todo el mundo muy agradable después de muchos años.

El viento está de poniente, de derechas, demasiado de mar al principio pero luego se puso de lado completamente, condiciones ideales. Incluso para una alcachofa navegante como yo.



Empiezo y termino de arbolar la 5.7 y la tablita de olas de 85 litros, guardo a los perros y me pongo el neopreno. ¡¡¡Al agua pato!!!

¡Los cabos de arnés! ¿Donde van?

¡La vela no tira! ¿Ya no se arbolar?

¿Donde va la botavara?

¿Se me ha olvidado todo?

Total me salgo aburrido a la media hora y después de tocar en el agua mil veces todo lo tocable. Cojo aire cuento hasta diez y retoco el material - suelta una chispa de escota, retrasa los cabos de arnés, baja la botavara y cambio el arnés que me regalo mi mujer por navidad y cojo el Ozu superviejo- al agua de nuevo con las rodillas temblequeando después del ridículo de la primera media hora, con sesión de senderismo con el material de windsurf a cuestas.

Entro en el agua, un pie sobre la tabla, vela lista para el beachstar, y .....después de dos horas me salgo del agua derrotado.

En esas dos horas y tras un beachstar fabuloso que fue el principio de todo, la tabla planea, la vela porta de maravilla, los cabos de arnés están en su sitio...salgo al largo paso la rompiente, me doy un bordo  que me supo a gloria. Llego la hora de dar la vuelta, selecciono la ola y me sale una trasluchada de libro sin perder el planeo y otro superbordo hacia la orilla, surfeada de espalda y al agua, y de nuevo a empezar pero ahora todo ha cambiado y me encuentro en el agua muy motivado, por lo que la tarde se pasó enseguida entre saltos, algún intento de backloop y unas surfeadas impresionantes sobre todo de frente a la ola, con bottoms  incluidos.

Hubo momentos mientras surfeaba sobre todo que estaba tremendamente fatigado, la vela la llevaba a mano, pero después de ver la primera surfeada front side que me salió, donde los ojos clavados en la ola, los pies tirando y apoyando en los footstraps, el cuerpo inclinado hacia la ola, las manos agarradas fuertemente a la botavara y los brazos semiflexionados poniendo a la vela a ras del agua que  hicieron que la tabla se cantease en el seno de la ola, hicieron que la botavara rozara el agua para entrar en la pared en el momento justo que rompía la ola.....


...Soy un windsurfer feliz que por un momento pense que tenía dieciocho otra vez.











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